¿Qué es el "Edging"? Por qué Controlar el Orgasmo Cambiará Tu Vida Sexual
Por si aún no lo sabías, el edging puede aportar muchos beneficios físicos y mentales a tu vida sexual, a la relación con tu cuerpo y, si tienes pareja, a tu pareja sentimental.
Que es el edging?
También conocido como teasing, surfing o peaking, el edging es la práctica sexual consistente en acercarse repetidamente al clímax y luego detenerse bruscamente, descansar y volver a empezar el proceso tantas veces como lo permita el autocontrol.
Significa llevarte a ti mismo (o a tu amante) al borde del orgasmo de una forma tentadoramente lenta que se acumula hasta una liberación culminante increíblemente intensa.
¿Sabías que existen varios tipos de orgasmo? Llevar repetidamente el cuerpo al borde del orgasmo amplifica las terminaciones nerviosas y hace que fluya más sangre a la zona pélvica, lo que aumenta las sensaciones y provoca orgasmos de todo tipo.
¿Para qué sirven el edging y el control del orgasmo?
Además de ser divertido, el edging tiene una serie de ventajas que podrían sorprenderte.
La razón principal por la que la gente se siente atraída por el control del orgasmo es para experimentar orgasmos más fuertes e intensos. Pero la práctica consciente de la negación y el control del orgasmo también te hace apreciar las otras partes del sexo, en particular esos deliciosos momentos que preceden al orgasmo.
¿Qué es el edging? Para muchas personas, el edging es una forma útil de hacer que el sexo dure más tiempo, lo que puede ser útil si eres propenso a precipitarte. Además, como el control del orgasmo y la negación del orgasmo requieren control físico y mental, ayuda con problemas como la eyaculación precoz, la disfunción eréctil y la ansiedad de rendimiento.
El edging y el control del orgasma tienen otros beneficios, tanto emocionales como psicológicos. Al subvertir la idea de que el sexo es una carrera hacia el clímax, el control del orgasmo replantea las ideas dominantes sobre lo que es el sexo. Destaca la importancia de los preliminares y de la experiencia placentera del sexo en su conjunto, no sólo de la penetración.
Dado que el edging requiere atención plena, concentración mental, conciencia física y comunicación, puede convertirse en una herramienta casi terapéutica que te permita conocer mejor tu cuerpo y sentirte más conectado con tu pareja.
Utiliza el edging para mejorar tu vida sexual
Hay formas distintas de explorar el control del orgasmo o la excitación en solitario o en pareja. Puedes incorporarlo a cualquier tipo de sexo, pero hagas lo que hagas, asegúrate de centrarte en las sensaciones y en el momento.
Cuando pruebes el edging con tu pareja, es poco probable que ambos podáis llegar al orgasmo al mismo tiempo, ya que nuestros cuerpos son diferentes (pero si puedes, ¡hazlo!). Esto significa que se dará prioridad al placer sexual de una persona a la vez.
Sin embargo, ten en cuenta que cuando uno de los miembros de la pareja lleva al otro al clímax tras negar o controlar el orgasmo, también experimenta una liberación energética enormemente placentera.
Explóralo solo
- Prepara el escenario. Esto se trata de ti y de tu placer, por lol que debes reservar tiempo y hacer que tu entorno sea sensual y confortable. Para ello, asegúrate de qie estás solo, con sábanas limpias y velas encendidas.
- Reduce la velocidad y presta atención. Tócate lentamente todo el cuerpo y piensa en cómo se siente cada caricia, cómo responde tu cuerpo y qué pasa por tu mente. Tócate los genitales cuando estés preparado. Concéntrate en respirar lenta y profundamente, y no tengas prisa.
- Detente cuando estés cerca. Cuando sientas el orgasmo, para por completo, deja que tu cuerpo se relaje, respira produndamente y vuvlve a empezar.
- Repite. Reproduce este ciclo tantas veces como puedas. ¡Cuantos más retrasos, mejor!
Explóralo en pareja
- Juegos preliminares lentos y prolongados. Tómense su tiempo para pasar por todas las etapas del sexo, explorando el cuerpo del otro y haciendo que los preliminares duren mucho tiempo. Masajes, besos, caricias, dedos, sexo oral, sexo con penetración, juguetes... Toca de nuevas formas en nuevas zonas.
- Vete construyendo hasta el orgasmo y para. Tómense su tiempo para llegar al orgasmo mediante cualquier estimulación que deseen y cuando uno de los dos esté cerca, paren, hagan un descanso, vuelvan a una forma más suave de estimulación como el masaje, luego reanuden...
- Desarrolla una señal para cuando estés al borde del orgasmo. Puede ser una señal física o simplemente ¡estoy cerca!
- Habla sucio con conocimiento de causa. ¿Qué sientes cuando te toco aquí?¿Dónde quieres que te toque ahora? ¿Estás lista para el orgasmo? ¿Cómo lo has sentido?
Hazlo perverso
Edging, la negación del orgasmo y el control del orgasmo son populares en la comunidad, especialmente entre las personas que practican el BDSM o los juegos de poder.
¿Qué es el edging? El control del orgasmo puede ser una forma caliente e intensa de explorar dinámicas de poder porque la pareja sumisa tiene que entregar su cuerpo y su placer a su pareja dominante, que tiene el control sobre si llega al orgasmo y cuándo.
Disfruta de la experiencia y el control del orgasmo llevando a tu pareja al borde del clímax y haciendo que te pida más, o negándoselo por completo (¡dejándo el calentón!) como parte de un travieso castigo BDSM.
Como hemos dicho, el edging puede aportar todo tipo de beneficios a tu vida sexual. Es una gran forma de juego previo e incluso una buena manera de prepararse para el juego anal por su capacidad para relajar la mente y el cuerpo.
Disfruta y explora esta práctica de la forma que más te convenga. Si tienes concentración y autocontrol, aprenderás mucho sobre tu cuerpo y te sorprenderás gratamente del mundo de sensaciones que te has estado perdiendo.